Estacionado
Había una estación de metro llena de gente. Algunos vestían de fiesta, otros como de vuelta del trabajo.
Pero si te fijabas bien, había pequeños detalles. La ropa, no parecía de la talla adecuada en muchos de los casos.
Unos bebían o comían, otros charlaban… Pero el detalle más importante es que a esta estación no llegaba ningún tren.
El último metro anunciado, aún estaba en el panel, pero su hora ya había pasado. A parte de que el reloj tampoco marcaba la hora correcta. Al cabo de un rato comenzó a parpadear y desapareció del panel, sin que allí llegara nada por el agujero del túnel. Y así uno tras otro, todos los anunciados.
La gente parecía ajena a todo eso, esperando pacientemente. Las hora pasaron y las horas se convirtieron en días. Y ninguno de los trenes hizo acto de presencia.
A veces, eso es la vida. Esperando a que llegue un tren, que la oportunidad de oro venga a nosotros. Sin que nos demos cuenta, que si tomamos las riendas de la situación. Con un pequeño esfuerzo, saliendo de la estación a pie, estaremos donde nos propongamos.
06/04/2023
Bueno, aquí hay una una lección dentro de esa atmósfera un poco extraña donde la gente ni se entera de que la ropa no le queda... Me gustó, lo sentí "misterioso". Se dejan pasar trenes, pero estar allí en una estación donde ni siquiera los hay... Mucho qué pensar.
ResponderEliminarUn saludo dominical!
Hay algo de surrealismo en la escena que queda a libre interpretación.
EliminarGracias por el comentario y feliz semana la que entra.
Dicen que el quiere puede, luego la vida te enseña que eso no es cierto.
ResponderEliminarEs lo que tiene querer alcanzar algo poco realista. Pero a veces es suficiente con salir de la zona de confort
EliminarHola Roland
ResponderEliminarMagnífico el concepto que trasmites en este cliché tan visual de esta estación sin trenes , trenes que no llegan y de gentes que esperan ahí en el túnel cuando el tren es lo de menos cuando se puede ir en bicicleta , a pie ... como sea ... lo importante es hacer lo necesario para vivir tu vida sin esperar a que la fortuna de un buen tren te lo solucione todo.
Tener ganas de vivir y de conseguir metas es la esencia de la vida .
Me encantó tu relato.
Magnífico!!
Hola Nieves.
EliminarVer las cosas con perspectiva puede ayudar, luego la decisión ya es de cada uno.
Me alegro de que haya gustado.
Sin duda así de sencillo debería ser. Que verdad es que la gente parece ir por el mundo sin fijarse a su alrededor. Una lección de vida es tu relato. La conclusión y reflexión que deja es tan real como la vida misma... Una estación vacío con destino a ninguna parte. Me encantó. Un abrazo
ResponderEliminarY ahora con la miraba en el móvil, menos se fija uno alrededor.
EliminarMe alegro de que te gustara. Un abrazo.
Muy cierto Jorge Roland! Mientras leia pense que eran los que estaban esperando para pasar al otro lado jajajaja (disculpa la falta de acentos)
ResponderEliminarUn abrazote
Hola Natalia. Jajaja quién sabe a donde van.
EliminarUn abrazo grande.