Horarios



El chico se bajó del tren, aún le resultaba extraño viajar con tan poco equipaje.

- ¡Usted no debería estar aquí, ha llegado demasiado pronto! - Exclamó el jefe de estación nada más verlo llegar.

- ¿Cómo dice?

- Su llegada, no estaba programada. ¡Hay cielos!

El chico no entendía la turbación del viejo y se quedó allí plantado observando como el hombre sacaba su libretita y se ponía a rebuscar entre las hojas como loco.

Parecía que por fin había dado con algo - Veamos... ¿Premio Nobel o cantante de Rock?

El chico se relajó, eso lo explicaba todo – Creo que se confunde, mi nombre es Manuel y soy un simple albañil.

- ¡Anda, anda! Eso ya lo sé, y yo San Pedro. Me refería a si prefiere reencarnarse en un premio Nobel o en una estrella del rock, hasta que sea su hora. ¡Elija ya, no tenemos toda la eternidad!

04/05/2019

Aquí estoy de nuevo. Septiembre... Un año por delante.

Comentarios

  1. Hola Roland! Me fascina verte por aquí.

    Un cambio radical, de albañil a estrella de Rock... Yo me pediría escaladora de ocho miles para ver el mundo desde lo mas alto. :)

    Un abrazo grande y seguiremos pasando por aquí un año más

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    1. ¡Hola Nieves!

      Jajaja La verdad es que es sugerente y podría dar para más relatos.

      Otro abrazo para ti!

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  2. ¡Hola Roland!

    Las reencarnaciones andan cada vez más raras :)

    Muy buen relato, como siempre.

    Estupendo que hayas vuelto. ¡Abrazos!

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    1. ¡Hola Poe!

      Si, un poco de capa caida jjjj A mi que me pongan cuarto y mitad, que tengo varias ideas

      !Gracias y abrazos!

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