Una noche más




Una noche más 19/11/2013

Se encontraba sola, en casa. La noche era fría, no había nada que hacer, nada por quien hacer la cena. Estas iban a ser sus primeras navidades sin ellos. Trataba de consolarse con lo de… “pero si es como una noche más, una noche cualquiera” Pero no, no lo era.

Le resultaba casi imposible no pensar en los que le faltaban, y en la soledad. Pero sobretodo, los echaba muchísimo de menos. Allá donde estuviesen… ojalá existiese el cielo, pero no pensaba que existiera nada. Si de algún modo vivían era en sus recuerdos. 

Cuantos abrazos que no serán dados, cuanto cariño, cuanto amor. ¿Qué voy a hacer con todo esto ahora? Se decía. Un par de lágrimas comenzaron a surcar sus mejillas, rodaban con tanta fuerza que al llegar a la barbilla cayeron al suelo.

Le costaba horrores mantener el ánimo. Fue hasta la ventana y la abrió, el frío inundó la estancia y llenó sus pulmones. Se abrazó a ella misma y miró al cielo.

Entonces, casualidad o no, una estrella fugaz cruzó el cielo y desapareció. Sonrió tímidamente y volvió a cerrar la ventana. ¿Qué es lo que ellos hubiesen deseado para mí?

Se acercó hasta el teléfono y marcó un número. Permaneció en pié a la espera de que alguien descolgara – Hola… ¿Jake? Soy Sara ¿Sigue el pié lo de la cena de esta noche? – En la garganta se le nudo que hizo que le costara reprimir un sollozo – Genial, nos vemos en un rato.

Seguía un poco amargada, pero respiró hondo y pensó “la vida sigue, hay que hacerse el animo”

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Siguiente texto extraído de la prueba de los diez minutos. Una historia más sentida, melancólica. Adaptable a las circunstancias por las que más o menos vamos pasando todos en la vida. Como casi siempre un mensaje final, la pizca de esperanza, y es que hay que hacerse el ánimo, la vida sigue.

Fuente imagen: http://intuicionesdelunaazul.blogspot.com.es/2014/03/preludio-en-blanco-y-negro.html

Comentarios

  1. Vaya, al igual que a Sara, a uno se le hace un nudo en la garganta al leer este escrito.. ¡¡gracias por compartirlo amigo!!

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    1. Me alegro de el relato corto transmita tales sensaciones. Nada, nada, tracias a ti por tu comentario y por leerme. ¡Saludos!

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  2. De nuevo uno de los relatos de esa prueba tan curiosa, y que tan buenos resultados da. Es un relato breve, muy melancólico, y a ratos realmente dramático, que plantea muchas preguntas que el lector ha de responder con su imaginación.. quién falta, por qué.. Ese instante de la vida de Sara que dejas que entreveamos tus lectores da pie a mucho más, y de nuevo te felicito por tu relato :) ojalá pongas más en breve! tVm*

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    1. Supongo que me gusta jugar con las incógnitas y sinceramente, creo que juego hasta conmigo mismo, me sirve para ir tirando de la madeja y así desarrollar una historia. Gracias por tu amable comentario :*

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  3. Hooa Roland, mi amigo, (me encanta que lo seas) sento el plomode esas dos lagrimas que llegaron al suelo, sera porque me he sentido asi algunas veces... Pero como siempre, esa voz salvadora que nace de adentro y lo ayuda a uno a no perder el animo. Que maravillosamente humanos son tus relatos. Un abrazote!!!

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    1. ¡Hola Natalia! Y a mi me encanta que seas mi amiga :) Gracias por tu comentario, me alegro de lo que te transmiten mis relatos, esto siempre da ánimos para seguir con más. Un abrazo grande!!

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  4. Un relato interesante, voy a hurgar más por aquí..

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