La chica del tren
Era un chico joven, todavía aprendiendo de la vida. En su primer trabajo, con sus primeros sueños. Vestía una chaqueta vaquera, se había dejado el pelo largo y se había comprado una guitarra. En aquel septiembre tan gris y lluvioso tomaba todos los días el tren para ir a trabajar. Escuchaba música por los auriculares, y miraba a través de la ventana empañada, las siluetas de los árboles quedar atrás. Miró en dirección a la puerta por la que iba a subir ella, ya sabía de antemano por cual lo haría, pues era lo habitual. Aquella chica le quitaba el aliento. Con su pelo largo y ojos profundos. Solo podía contemplarla. Soñaba con levantarse y presentarse. Pero se sentía tan atraído, como inmovilizado; como si su cuerpo pesara toneladas. Sin darse cuenta se había pasado todo el trayecto mirándola. En la siguiente parada la chica del tren se levantó para bajarse, lo miró y se puso a reír, pues se había dado cuenta de las miradas del chico. Él intentó abrir la boca con todas sus f...