Entradas

Mostrando entradas de enero, 2023

Historias del camino 2.- Amor

Imagen
Era un hombre que aparentaba menos edad de la que tenía. Llevaba un mochila que pesaba más de 15 kg en la que llevaba de todo, hasta una silla plegable. Si amigos, la vi con mis propios ojos, aunque él presumía de lo ligera que era. Como si de una película se tratara, resultó ser un oficial retirado del ejército de los EEUU. Le encantaba la aventura y las excursiones por la naturaleza, para tener ocupada su mente. Estaba haciendo el camino, porque se había propuesto realizar una ruta por el estado de Colorado, de más de 700 Km. Él solo y por zonas donde no hay albergues, en plan acampada libre. Una aventura que iba a ser dura y quería hacer el camino como entrenamiento previo. Hablamos de las diferencias entre nuestros países. Cuando surgió el tema de las armas, me contó que en su país si que tenía una pequeña, que no podía llevar a la vista; pero que cuando iba de ruta y pasaba la noche en una tienda de campaña, eran zonas donde podía salirte un oso, y él se sentía más seguro con ella

Historias del camino 1.- Superación

Imagen
  La vi por primera vez por el camino, iba por delante de mi a un ritmo suave. Paraba a ratos, realizaba un movimiento extraño, moviendo la cadera de un lado a otro, y volvía a continuar. La rebasé, la saludé como a cualquier otro peregrino, y me dedicó una sonrisa resplandeciente. Aunque pueda parecer algo trivial, ahora contaré porque no lo era tanto. No recuerdo si fue esa noche o la siguiente, resulta que coincidimos en un albergue, a la hora del desayuno. En un principio no la reconocí, entre tanta gente uno no se queda siempre de primeras con todas las caras. Pero me acordé cuando hablando entre peregrinos, y charlando de cómo nos encontramos, la chica comentó que tenía problemas con la cadera que venía arrastrando desde hacía varios días. Una vez más, me fijé en como sonreía y se preocupaba por todos. Pero al levantarse de la mesa, nos dimos cuenta de que iba casi arrastrando los pies, y que bajo esa sonrisa, estaba sufriendo un dolor bastante importante. Otra de las chicas se o

Buen camino

Imagen
  Fue al día siguiente de aquel tan duro en el que tocó subir los pirineos. Todas las previsiones indicaban lluvia. Los echaron bien temprano del albergue, cuando aún la noche era totalmente oscura.  Desayunó con rapidez, sorprendentemente no llovía y había que aprovechar estas horas. Se despidió de sus nuevos amigos y comenzó a caminar. Con paso decidido, pero a la vez cauto pues apenas se veía el suelo. Cuando miraba alrededor se parecía adivinar que el lugar era realmente bonito, lástima de oscuridad. Al cabo de una hora de caminata, cuando ya había buena visibilidad, hizo el primer descanso. Un poco temprano, pero muy acertado pues apenas 5 minutos después comenzó a llover. Ponerse el impermeable, ponérselo a la mochila… No son cosas fáciles en mitad de un camino. Iba bien pertrechado, y concienciado con los posibles resbalones. Pero la mayor incomodidad era que en kilómetros y kilómetros no había un lugar seco en el que sentarse, y hasta pararse para buscar la botella de agua era