Fénix



Era un chico apocado, introvertido. Tenía tendencia a pasar desapercibido, no hablaba mucho aunque su mente era un hervidero de ideas, de opiniones, de sentimientos. Un chico que tenía todas las papeletas para ser víctima de los abusones de turno, y así era. Eran frecuentes los días con burlas, cachetes y bromas de mal gusto. 

Eso no quitaba que soñara despierto con chicas, con las más guapas. Pero más de una vez soñó también que conocía a su escritor favorito, uno extranjero de fama mundial. Su corazón vibraba solo de pensarlo.

Un día al terminar uno de aquellos libros, se dio cuenta de que los protagonistas de esas historias se enfrentaban a los terrores más intensos, y a pesar de que no siempre salían airosos, al menos demostraban al malo que no lo iban a tener nada fácil.

Decidió enfrentarse a los abusones, él podía ser como uno de esos protagonistas. Tal vez saliera con un ojo morado, pero el otro no se iría de rositas.

No tardó en darse la oportunidad, al primer insulto, respondió. Al empujón, hubo una patada. El enfrentamiento no llegó a más pues los mismos compañeros los separaron. 

Tras el breve enfrentamiento pasaron dos cosas: la primera es que notó como por primera vez recibía miradas de admiración. Y la segunda, el abusón dejó de importunarle.

El chico pudo vivir mucho más tranquilo, pero no más feliz. Pensó que si la respuesta a la violencia, es la violencia… algo no anda muy bien en este mundo. 

13/05/2019

Comentarios

  1. En pocas palabras tocas un tema muy complejo, y lo haces de una manera clara y honesta. Me encanta.
    Abrazote

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Natalia.
      Si que es complejo y una de las lacras de nuestra sociedad.
      Un abrazo grande!!

      Eliminar
  2. Hola Roland !

    Así es, una pena que el mundo funcione así. Puede que por muchos años que pasen la ley del más fuerte sea la que siga triunfando pero creo que no hay nada mejor que el sentido común, el respeto y la empatía con los demás. Deseo que algún día sea esto lo que triunfe.

    Un relato magnifico Roland .

    Saludos y feliz semana :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola Nieves!
      Hermosos valores los que comentas, ojalá así sea.
      Feliz semana!

      Eliminar
  3. ¡Hola Roland!

    Hace falta una intensa valentía para enfrentarnos a nuestros miedos, y al protagonista de tu historia ese valor le hizo mejorar, bravo por él

    Una estupenda historia de superación :)

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares

El pájaro y la ardilla

Pasillo solitario

Oda a la oscuridad